La docencia en la escuela profesora Estela Zoneida Gondres de Ortega, en la comunidad de Básima, Villa Altagracia, está suspendida por intoxicaciones de alumnos y personal docente debido a la inhalación de sustancias químicas lanzadas al aire.
Desde el año 2019 enfrentan la problemática y ya van cuatro ocasiones que se intoxican alumnos y padres y tienen que ser llevados a las emergencias de los centros de salud de la localidad con problemas estomacales, dolor de cabeza, vómito, acalambramiento de manos y brazos, entre otros males. El plantel tiene una población estudiantil de unos 500 alumnos.
Job Víctor Pleciviz, residente cerca del plantel y miembro de la comunidad educativa, explicó que en el año 2019 alrededor de 25 niños resultaron intoxicados al inhalar un tóxico que se sospecha es pesticida o herbicida de una empresa de cítricos que le queda al frente y que se dedica al cultivo de naranjas, coco y otros frutos.
Informó que el 26 de enero hubo otro caso en el que alumnos y profesores tuvieron los mismos síntomas que en el 2019 y fueron llevados a varios hospitales y fue necesaria la intervención de entidades como Defensa Civil, el 9-1-1, los bomberos y otras.
Por esta razón hubo algunas semanas sin clases, pero luego abrieron y al cuarto día ocurrió la más reciente situación, que se generó el pasado martes cuando varios niños tuvieron que ser sacados del plantel con los mismos síntomas e ingresados en centros de salud. Fue entonces cuando la dirección del plantel y los padres decidieron no continuar con la docencia.
- «Nosotros estamos exigiendo que nos den una explicación de lo que está sucediendo tanto la comunidad como la escuela no tenemos nada en mano».
Sixto Emiliano, padre de dos niños de 8 y 10 años, informó que sus hijos están padeciendo la secuela de las intoxicaciones porque con frecuencia tienen dolor de cabeza, estomacales, fiebre, por ejemplo, Jenderson tenía fiebre», indicó.
Manifestó que, en su caso, ha tenido que amanecer con los niños en los hospitales intoxicados y lamentó que las autoridades de Educación ni de Salud Públicas se hayan motivado a investigar la situación y a tomar las medidas de lugar.
«Los niños siempre tienen un problema de garganta, problemas de apretamiento de pecho, dolores estomacales, y de cabeza, es una odisea la salud de nuestros hijos».
Deploró que las autoridades que deben dar explicación de lo que pasa e investigar no lo han hecho, a pesar de que el problema no solo afecta a los estudiantes sino a toda la comunidad cercana a la empresa.
Ante la pasividad de las autoridades los padres de los alumnos y los docentes organizados en la Asociación Dominicana de Profesores han realizado actividades para exigir el cese de la contaminación y la afección a la salud de estudiantes y comunitarios, entre ellas una marcha que realizarán este viernes.