AGENDA ORIENTAL, SANTO DOMINGO
Por Mihail García
Un partido político para insertarse en el tejido social no puede fundamentar su dinámica interna en la lucha constante entre la experiencia y la juventud. Esto, en modo alguno, supone un argumento para perpetuar el liderazgo del mismo, si no, más bien, un llamado a la renovación constante, pero, de manera sinérgica.
Juan Bosch, guía moral de nuestro partido, decía que, ¨El que no se dé cuenta de que los cambios sociales se producen en el seno de la historia no puede dedicarse a la política con éxito porque nunca comprenderá lo que pasa alrededor suyo¨.
Tomando como premisa principal lo dicho por el profesor Bosch, podemos apuntar que parecerse a la sociedad es fundamental para una organización política, puesto que es ese parecido el que le dará una conexión genuina con los ciudadanos.
De manera que, para hablar de renovación, entendiendo está como un proceso en donde se le inserta nueva energía y bríos a algo, necesariamente debe pensarse en la inclusión de elementos nuevos que permitan dotar de nuevas herramientas al instrumento, en este caso al partido, pero si bien en la renovación se necesita de esto, no es menos cierto de que es significativo dejar columnas, vigas y otros elementos que permitan sostener de forma efectiva los cambios que se realizaran.
Es por ello que, desde mi óptica, la renovación debe ser sinérgica, aprovechando la experiencia de la dirigencia tradicional del partido y el necesario empuje que brinda la juventud, de esta forma tendríamos una organización que se parezca y entienda la sociedad en cada uno de sus segmentos, con una dirigencia actualizada y hablando constantemente el lenguaje de cada uno de esos segmentos.
Como parte de este compendio que hemos denominado ´´Propuestas para ganar el futuro´´ en primer lugar sugerimos y apostamos a la renovación sinérgica, esto implica que todos los organismos de dirección del partido se ajusten al principio de complementariedad para que allí converjan la experiencia y juventud de nuestros miembros de manera transversal.
La juventud no puede ser solo para ocupar espacios dentro del mecanismo juvenil del partido, la juventud (que no necesariamente la condición etaria legal) debe interactuar transversalmente en las áreas de dirección del partido, sin que esto signifique arrasar con los mayores.
Concretamente, estamos proponiendo integrar en todos los organismos, direcciones y comisiones de trabajo del partido el criterio de pluralidad generacional, a fin de que cada espacio de trabajo tenga una visión holística de la sociedad que devenga en la planificación de estrategias y tácticas que nos permitan ganar el favor de la ciudadanía.
Para graficar lo que decimos, sugerimos que, en la demarcación donde la Máxima Autoridad partidaria sea una persona que pertenece a una generación, se trate de que el vicepresidente o el secretario general sean de generaciones distintas. Todo esto conservando el principio de la meritocracia consagrado en nuestros estatutos y declaración de principios.
Esta forma de auspiciar la renovación nos llevará, sin dudas, a Ganar el Futuro.
