AGENDA ORIENTAL, SANTO DOMINGO
El comunicador, Manuel Cruz, propuso cambiar la figura del Procurador General de la República ante el Consejo Nacional de la Magistratura y en su defecto, que ocupe su lugar, el Defensor del Pueblo.
El señalamiento de Manuel Cruz, es porque entiende que en la República Dominicana, cualquiera puede ser juez por la única voluntad de un Presidente, haciendo hincapié en que cuando el país en nueva vez tenga un presidente que no tenga el nivel de prudencia del presidente Luis Abinader, va a pasar lo mismo si se queda en la situación en que está.
“Como está estructurado el Consejo Nacional de la Magistratura, eso significa que única y exclusivamente, cualquiera puede ser juez, única y exclusivamente por la voluntad de un presidente de la República, el que fuera”, dijo.
Cruz destacó que, históricamente, los procuradores generales de la República han sido empleados del presidente, lo que genera una falta de independencia en el sistema judicial.
Asimismo, recalcó que esta situación ha sido aprovechada para incrementar los votos a favor del presidente en turno, especialmente en momentos donde no se tenía certeza sobre la mayoría absoluta.
Subrayó la importancia de reformar la Constitución de la República de manera integral, no solo para modificar uno o dos puntos. En su propuesta, Cruz sugirió que se revise el artículo 178 y se considere la eliminación del Procurador del Consejo Nacional de la Magistratura, reemplazándolo por la figura del Defensor del Pueblo.
Destacando esta figura, conforme a sus funciones, podría contribuir a fortalecer la independencia del Ministerio Público y, por ende, del sistema judicial en general.
Cruz mencionó que, aunque el presidente Luis Abinader ha demostrado prudencia en esta dirección, no se puede garantizar que futuros presidentes mantendrán el mismo nivel de prudencia.
“Por lo tanto, es esencial implementar reformas estructurales que aseguren la independencia del poder judicial”.
Según Cruz, la manera en que está constituido el Consejo Nacional de la Magistratura, permite que cualquier persona pueda ser nombrada juez exclusivamente por la voluntad del Presidente de la República, sin la necesaria independencia.