Azúa, República Dominicana – En las últimas horas, ha surgido una controversia en la provincia de Azúa, tras el nombramiento por parte de la ministra de Interior y Policía, Faride Raful, de un dirigente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) en un cargo clave dentro de la gestión pública local. Este movimiento ha provocado malestar y descontento entre los miembros del Partido Revolucionario Moderno (PRM) en la región.
Según informaciones obtenidas desde la provincia, los perremeístas en Azúa se encuentran indignados por lo que consideran un abuso de poder y un acto de favoritismo hacia un miembro del PLD, lo que, aseguran, compromete el compromiso del gobierno con su base de apoyo en la zona. Además, se han dado a conocer reclamos por parte de dirigentes del PRM en Azúa, quienes han pedido la intervención inmediata de las altas instancias del partido para revisar y, en su caso, rectificar esta decisión.
En ese sentido, fuentes cercanas a los perremeístas de la provincia han solicitado que tanto el presidente del Partido Revolucionario Moderno, José Ignacio Paliza, como la secretaria general del PRM, Carolina Mejía, intervengan para resolver lo que califican como un «desacuerdo interno que podría afectar la unidad del partido» en Azúa.
Aunque no se ha emitido una declaración oficial por parte de la ministra Faride Raful ni del Ministerio de Interior y Policía sobre los motivos específicos detrás de la designación, se espera que en las próximas horas se ofrezca una explicación para aclarar el proceso y la selección realizada.
La situación sigue siendo de atención dentro del PRM, pues este tipo de situaciones podría tener un impacto en la cohesión interna del partido y en la relación con los diferentes sectores que apoyan la actual gestión.