AGENDA ORIENTAL, SANTO DOMINGO
Por Juan López.
El próximo domingo 13 de abril, más de 13 mil ecuatorianos están llamados a votar en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales. Este balotaje será entre el actual presidente Daniel Noboa, candidato del partido Acción Democrática Nacional (ADN) y apoyado por el Partido Sociedad Patriótica (PSP, cuarto lugar con 2.69 %), y Luisa González por el partido Revolución Ciudadana (RC), respaldada por el MUPP (Movimiento de Unidad Plurinacional Pachakutik, tercer lugar con 5.25 %).
En la primera vuelta, efectuada el pasado 9 de febrero, el presidente Noboa quedó en primer lugar con un 44.17 %, mientras Luisa obtenía el 44.00 %, representando al correísmo. La diferencia fue de apenas 17,046 votos. Algo similar aconteció en las elecciones del 2023, ganadas por Noboa-ADN con una diferencia de 20 mil votos.
Ahora, las últimas encuestas publicadas, el pasado 3 de abril, proyectan un triunfo de Luisa-RC (correísmo más indígenas-MUPP) con un 53,47 % contra 46.53 % de Noboa-ADN+PSP.
La confrontación Noboa vs. Luisa es radical. Los ecuatorianos están divididos entre el sector ultraconservador que representan Noboa-ADN+PSP y la posición centro-izquierda del correísmo e indígenas (RC+MUPP).
Es válido recordar que Noboa llegó a la presidencia, en el 2023, para completar el período del también ultraconservador presidente Guillermo Lasso. Este período gubernamental del presidente Noboa se ha caracterizado por frecuentes controversias nacionales e internacionales, por la soberbia del presidente con violaciones flagrantes de la Constitución y de varias leyes, incrementar la crisis económica con una creciente inflación, aumento de la inseguridad ciudadana como consecuencia de la violencia de las pandillas armadas y el narcotráfico que han quebrantado la paz social en Ecuador.
Al respecto, es válido mencionar el escándalo internacional que, por mandato directo del presidente Noboa, los militares ocuparon, violentamente, la embajada de México, en total violación del fuero diplomático, para apresar a Jorge Glas, exvicepresidente de Ecuador, quien estaba exiliado y ya contaba con el salvoconducto mexicano.
También, mediante un feísimo rosario de varios espectáculos públicos, inconstitucionales e ilegales, desde el inicio de su gobierno, el presidente Noboa ha escenificado contra la legítima vicepresidenta de Ecuador, Verónica Abad, elegida en la misma boleta, producto de la alianza electoral que le garantizó el triunfo en el 2023.
Porque el gobierno del presidente Noboa ha sido ineficaz, no ha resuelto los problemas que afectan al pueblo ecuatoriano, no ha llenado las expectativas mesiánicas que creó en su condición de “candidato outsider” y, por el contrario, los ha agravado por su prepotencia e incapacidad. Esas realidades son pruebas fehacientes para que su reelección resulte improcedente e inconveniente para el pueblo ecuatoriano, razón más que suficiente para preferir un triunfo electoral de Luisa González-RC+MUPP.
Los ecuatorianos merecen y necesitan que el Consejo Nacional Electoral (CNE) garantice que la elección, en esta segunda vuelta, sea justa, equitativa, participativa, con resultados transparentes y respetados por todos.
Abogamos por el triunfo de Luisa-RC+MUPP para que pueda implementar el programa de gobierno que están ofertando. Creemos que el gobierno que surgirá del triunfo de esa alianza podrá superar la grave crisis económica, social y política que está padeciendo Ecuador.
Porque deseamos el progreso, bienestar, paz y justicia social para los hermanos ecuatorianos, el próximo domingo 13 proyectamos los sinceros sentimientos de solidaridad del pueblo dominicano para que, en las elecciones de Ecuador, ¡Ojalá gane Luisa!