AGENDA ORIENTAL, SANTO DOMINGO
ESCRITO POR: José N. Germosén, CEO Servir Al Partido.
El Partido de la Liberación Dominicana nace en el año 1973, con la misión de completar la obra inconclusa de Los Trinitarios, liderados por Juan Pablo Duarte. Es por eso que, en sus inicios, Juan Bosch delineó las condiciones y características del dirigente que debía formar el partido con miras a desarrollar; un partido que pudiera luchar con posibilidades reales de éxito, por el desarrollo político, económico y social de nuestra República Dominicana.
Desde la dirección del Estado, el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) ha dejado una impronta en todas las esferas del desarrollo nacional: construcción de decenas de miles de aulas, Jornada Escolar Extendida, desayuno, almuerzo y merienda escolar; el servicio de emergencias médicas 911, construcción de la Central Termoeléctrica Punta Catalina (luz 24 H), desarrollo vial y de infraestructuras, como el Metro de Santo Domingo, El Teleférico, desarrollo agropecuario, las Visitas Sorpresa, entre otros tantos logros para el país.
El PLD ha sido y será guardián confiable de nuestra democracia; de la libertad y la dignidad humana, a la vez que puede presentar sus grandes aportes a la justicia social.
La lucha contra la pobreza también fue un pilar importante en los gobiernos del PLD. Es decir, que hemos puesto al servicio de nuestro pueblo la actividad política desde el Gobierno, desde nuestro partido, que es el que más ha aportado en pro del desarrollo y el bienestar del pueblo dominicano. Como resultado de la gran obra de gobierno desarrollada por el PLD hemos estado bajo el fuego cruzado del Gobierno actual y su supuesta justicia “independiente”, la cual que se ha ensañado contra el Partido de Bosch. Esa “justicia parcial” nunca pasará a la historia como imparcial ni independiente; hace tiempo que el país sabe su naturaleza y conoce su accionar: su radio de acción, que es única y exclusivamente la cacería de ex funcionarios de nuestro partido. No puede ser independiente una justicia proveniente de un sector político aliado al Gobierno actual, más claro de ahí ni el agua potable.
A falta de pruebas condenatorias suficientes se han enfocado más en propiciar el descrédito de los imputados, que en perseguir el supuesto crimen per ce. Para tales fines, esta justicia ha usado una enorme cantidad de dinero público, despilfarrado en una férrea campaña publicitaria a nivel de medios de comunicación. Por otro lado, la compra de dirigentes a todos los niveles por parte del partido de Gobierno, así como unos que otros “desencantos”, para librarse de ser alcanzados por los tentáculos de Diosa Temis, que opera como la segunda la mando cargando la “pesada” balanza y así evitar algún expediente por encargo. A ese nivel de perversidad política se ha llegado en este país. Sin embargo, el PLD sigue firme y decidido a renovarse, a crecer y a organizarse para la toma del poder. La persecución política no logrará sus oscuros propósitos, aunque en las dos últimas elecciones hayamos obtenido resultados electorales desfavorables, sobre todo en la Boleta Presidencial, porque a nivel municipal y congresual, el PLD está sobre el 24%, lo que indica que el liderazgo local está afianzado. Esos resultados son coyunturales, y prueba de ello es que actualmente, a 8 meses de pasadas las elecciones, el PLD está mucho mejor posicionado dentro la preferencia del electorado. En cambio, la popularidad del Gobierno está muy maltrecha; más de un 68% no votaría por el PRM, según recientes encuestas.
En estos momentos, el partido está inmerso en completar los mandatos emanados en su Décimo Congreso Ordinario Reinaldo Pared Pérez. En cada demarcación se está conformando el Tribunal de Ética y Disciplina y para el próximo 9 de febrero serán elegidas las secretarías. Este proceso de febrero es clave para el futuro inmediato del PLD, el cual necesita salir cohesionado y con visión clara alrededor de una idea: conquistar de nuevo el favor del electorado, para retomar el poder en el 2028; para ello debemos seguir el proceso iniciado de rescate y valorización de los principios y métodos del partido, para trabajar junto al pueblo en la lucha por sus derechos, conquistas y bienestar. Vamos a trabajar en el seno del pueblo, en el territorio, conquistando las organizaciones sociales, culturales, gremiales y profesionales.
Que en todos los niveles de nuestra dirigencia asumamos un compromiso tangible, con el partido y con sus propósitos. Vamos a exhibir una oposición inteligente, firme y decidida, pero junto al pueblo organizado, para así salir de la incertidumbre que le produce al pueblo las improvisaciones y pésima gestión gubernamental del PRM.
¡Levantemos y sostengamos al PLD que el pueblo espera, al PLD organizado; el de las grandes realizaciones, el que trabajó para el pueblo: el PLD del mañana!
